Confieso que siempre me ha parecido extraño eso de crecer. ¿No os pasa que la gente habla de ello como si fuese algo inevitable, casi como una obligación? Pues yo no lo veo tan claro. Siempre he preferido jugar, reír, explorar; todo eso que algunos llaman «cosas de niños», pero que para mí son simplemente lo mejor de la vida.
Mi secreto: mantenerse joven no es solo un sueño
A veces escucho a los demás decir que quieren quedarse jóvenes para siempre, pero luego corren hacia lo contrario. Yo sí que creo que quedarse joven es posible, al menos en lo esencial: mantener viva la curiosidad, la imaginación, el deseo de aventura. ¿Quién dijo que ser adulto significa renunciar a todo eso?
¿Es una aventura inevitable?
Sin embargo, reconozco que incluso yo siento curiosidad por saber qué pasaría si decidiera crecer. ¿Quién sería? ¿Qué aventuras viviría si diera ese salto al vacío que todos parecen ansiosos por dar? Supongo que crecer puede ser también una aventura interesante, aunque no me convenza del todo aún.
Mi viaje personal
Cada uno vive la juventud a su manera. Algunos amigos parecen desear profundamente convertirse en adultos responsables, mientras que otros, como yo, disfrutamos cada instante con la intensidad de quien vive eternamente joven. Quizá la verdadera aventura sea elegir cómo queremos vivir este momento.
Mi forma de afrontar este dilema
- Vivo plenamente: disfruto cada juego, cada risa, cada pequeña travesura.
- Me adapto sin cambiar mi esencia: he aprendido que crecer no significa abandonar la imaginación, sino aprender a llevarla contigo siempre.
- Aprendo de las historias de otros: sí, aunque no lo parezca, me encanta leer. Las historias de los demás me enseñan mucho sobre aventuras que quizá algún día pueda vivir yo mismo, o no.
Y es que, al final, crecer o no crecer puede que sea una elección, o al menos eso me gusta pensar. Mientras tanto, sigo buscando respuestas en las aventuras de los libros, porque en cada historia descubro algo nuevo sobre mí mismo.
Quizá vosotros, como yo, podáis encontrar la clave leyendo historias sobre aventuras ajenas que, en realidad, son un poco nuestras también. ¿Quién sabe? Tal vez algún día decida dar ese paso… o quizá no.
Peter.